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El filme, basado en un hecho real, es uno de los primeros en ese país centroamericano que retrata el mundo indígena del altiplano, según dijo Ramírez en exclusiva a Prensa Latina durante su estancia en la cita fílmica que concluye este domingo.
El cineasta dejó atrás a otros fuertes candidatos como el argentino Pablo Giorgelli con Las Acacias y el cubano Ian Padrón con Habanastation, que despuntaban como favoritos.
Distancia dibuja el reencuentro del indígena Tomás Choc con su hija, 20 años después de que fuera secuestrada por el ejército guatemalteco.
Es una oportunidad para tratar de entender la historia y no volver a cometer los mismos errores, expresó el director, quien relató que en la actualidad existen casi 45 mil desaparecidos.
Más allá de convertirse en un éxito taquillero, lo importante para el cineasta es intentar con esta película reflejar la realidad.
Le debo mucho a Cuba, destacó. Aquí el fotógrafo se graduó en la Escuela Internacional de Cine de San Antonio de los Baños, el realizador de sonido también y el editor es cubano, precisó.
Para nosotros fue muy importante proyectarla en La Habana, sobre todo con el antecedente que conocimos de la gran preparación del espectador de esta isla, resaltó.
Distancia fue exhibida con anterioridad en Quetzaltenango, un pueblo del occidente guatemalteco, de origen Quiché, de donde son oriundos sus actores.
También se presentó en el recién celebrado festival Ikaros, el más importante de Centroamérica, organizado en ciudad de Guatemala, donde mereció el premio del público y el lauro a la mejor película centroamericana.